Guía completa sobre los diferentes tipos de vasos desechables y reutilizables
¿Eres más de vasos desechables o de vasos reutilizables? La elección de un tipo de vaso u otro depende de varios factores, en función de la situación, de los hábitos, de quien haga uso de ellos… Ahora bien, todos ellos cuentan con ventajas diferentes que se ajustan a las necesidades específicas de quienes optan por unos tipos de vasos u otros y en este artículo queremos ayudarte a entenderlo. ¡Sigue leyendo para informarte!
¿De qué están hechos los vasos desechables? Los tipos de vasos desechables según sus materiales
Los vasos desechables o vasos de uso único son un tipo de vasos pensados para ser utilizados una única vez. Los mismos surgen como sustitutos de los vasos de cristal, por la comodidad de no tener que lavarlos de manera posterior a su utilización en fiestas y otros eventos, por ejemplo; además cuentan con la principal ventaja de que pueden reciclarse fácilmente una vez han sido utilizados para ser transformados en nuevos productos. Los vasos desechables están fabricados, generalmente, de materiales como el poliestireno (PS y EPS), el polipropileno y, por supuesto, el cartón. En este apartado nos centramos en analizarlos en función de los materiales. Lo vemos.
Vasos desechables de papel o cartón
Los vasos de papel o vasos de cartón surgen como la principal alternativa a los vasos de plástico. Estos son 100% reciclables —pueden contener las etiquetas de los certificados impresas en ellos— y aíslan perfectamente el calor. Además, son resistentes a salsas y aceites. Los vasos de papel también pueden ser vasos de papel compostables, lo que significa que son ecológicos. En este caso también podemos hablar de vasos biodegradables.
Vasos de plástico desechables
Al hablar de vasos de plástico desechables, las opciones son mucho más amplias teniendo en cuenta la variedad de plásticos destinados al uso alimenticio que podemos encontrar en el mercado. Estos son los más comunes en el caso de vasos desechables:
- Vasos de poliestireno: Del tipo PS y EPS, principalmente. El material plástico es sometido a un proceso de expansión para abaratar costes. Aparentemente, suelen contener unas líneas corrugadas en la parte superior, para facilitar el reciclaje y reducir el espacio que ocupan.
- Vasos desechables duros de plástico PP: O polipropileno. Este tipo de plástico es uno de los más utilizados ya que destaca por múltiples razones, como su excelente resistencia química, baja densidad, gran pureza y por no sufrir agrietamiento por esfuerzo, entre otras. Además, es 100% reciclable. Lo podemos encontrar de varias formas, ahora bien, en el caso del plástico desechable PP este suele ser blanco y/o transparente y se adapta tanto a bebidas frías como calientes.
- Vasos desechables de plástico PET: Los vasos de plástico PET también son reciclables, ahora bien, se diferencian de los PP en que están pensados principalmente para las bebidas frías y son transparentes. Es habitual utilizarlos en zumos, batidos, lácteos y combinaciones de bebidas o helados con frutas.
Tipos de vasos reutilizables según sus materiales
Como es fácil de imaginar por su nombre, los vasos reutilizables están pensados para ser utilizados en varias ocasiones. Aunque lo más habitual es encontrarlos fabricados con plásticos duros como el polipropileno (que resulta muy resistente y puede lavarse sin problemas), también existen vasos reutilizables de otros muchos materiales. Hay que tener en cuenta que estos están fabricados con materiales que pueden reutilizarse sin sufrir daños y sin afectar a la salud de las personas y que, por lo general, se trata de vasos plásticos, como es el caso de los chupitos de plástico. Te explicamos cuáles son los más comunes.
Vasos polipropileno reutilizables
El polipropileno, también denominado PP, tiene infinidad de usos y puede emplearse para fabricar vasos reutilizables, pero también desechables —como hemos visto más arriba—. En el caso de los vasos reutilizables, estos destacan por ofrecer una excelente resistencia térmica de hasta 260º, aproximadamente, antes de fundirse. Es decir, son vasos que pueden ponerse en el microondas. Además, es uno de los plásticos menos contaminantes al convertirse en residuos —lo que justifica también su uso como vaso desechable—. Estos pueden utilizarse en conciertos o como obsequio en los enlaces matrimoniales, entre otras. Como decíamos, los vasos de polipropileno pueden ser de varios tipos, como los de polipropileno inyectado o los de polipropileno irrompible.
Vasos reutilizables de plástico policarbonato
Una de las características de estos vasos de plástico es su máxima resistencia a la rotura, pero también destacan por su alto brillo y por su durabilidad, lo que nos permite utilizarlos, por ejemplo, en el lavavajillas. Son muy recomendados para servicios de catering y eventos especiales.
Vasos desechables de plástico PS
El vaso de plástico PS se fabrica con un polímero termoplástico conocido como cristal plástico o vidrio plástico. Estos destacan por ser cristalinos e irrompibles (a menos que se ejerza mucha presión sobre ellos). Son ideales para cualquier evento, así como para ser utilizados en establecimientos de hostelería y restauración. Hay que tener en cuenta que el poliestireno es muy versátil, ligero y aislante. Además, esta resina es muy rígida y asombrosamente transparente. Entre sus aplicaciones, lo podemos encontrar como espuma, como una película para el envasado o como plástico rígido, como es el caso de los vasos de poliestireno. Además, destacan por ser muy económicos.
¿Existen vasos desechables y reutilizables?
Sí, como explicábamos más arriba muchos de los vasos de plástico pueden variar sus propiedades a la hora de ser fabricados, lo que significa que podemos encontrarnos con modelos más expandidos o extrusionados, así como plásticos combinados con otros materiales y diferentes alternativas que nos dan la posibilidad de reutilizar el vaso o desecharlo, en función de las necesidades. Los vasos desechables exclusivos son más económicos debido al proceso de fabricación de los mismos, mientras que los reutilizables (y fabricados con plásticos duros) aumentan su valor. En un punto intermedio, podemos encontrarnos los que cumplen con las dos características. Por supuesto, todos ellos pueden ser utilizados para uso alimenticio y no suponen ningún problema para la salud de las personas.